La última actividad del semestre en la asignatura del Máster de Educación y TIC (e-learning) en la UOC se ha estructuado en dos partes, una de las cuales lleva a la presentación de esta entrada: la elaboración de un mapa conceptual con Gliffy sobre todos los contenidos académicos.
Mapas conceptuales con Gliffy
Gliffy es una herramienta en línea para el diseño de todo tipo de esquemas, mapas conceptuales, diagramas de flujos e incluso mapas de navegación para páginas web. Aunque la página principal está en inglés, la interfaz de trabajo se presenta totalmente en español, si bien tampoco sería mucho inconveniente que estuviera en inglés, pues todo su manejo se basa en el típico gesto drag and drop (arrastrar y soltar) y en los menús contextuales.
A continuación muestro el diseño que he desarrollado para esta actividad (también disponible en éste enlace):
Además de disponer de una interfaz en español y de su facilidad de uso, presenta otras ventajas:
- Dado que todo el trabajo se lleva a cabo en la nube, Gliffy tiene la precaución de guardar borradores prácticamente con cada cambio que se lleva a cabo. En alguna ocasión se me ha forzado el cierre de la web pero el trabajo se ha recuperado fácilmente.
- Es posible trabajar colaborativamente sobre el diseño, aunque no he podido probar esta característica. Sería interesante saber si este trabajo colaborativo en línea es síncrono (al estilo de Google Apps).
- Gliffy permite compartir el diseño enviando un enlace, incrustando el diseño en una web o incluso guardar una imagen en una resolución suficiente para una buena visualización. En el último caso, la imagen realmente se almacena en la nube de Gliffy, con la ventaja de poder enviar el enlace a cualquier persona, aunque también desde ese enlace se puede descargar. Por supuesto, también se puede guardar un archivo local con una extensión reconocida por Gliffy.
- El tapiz de trabajo puede ser realmente grande, lo que facilita hacer diagramas o esquemas muy elaborados sin cortes de página.
- Facilita plantillas de diseño como punto de partida y numerosos elementos con los que construir el diseño. Estos elementos dependen del tipo de diseño que se quiera realizar (mapa conceptual, diagrama de Venn, mapa de navegación web, etc.), pero nada impide que todos estos elementos puedan combinarse entre sí en un mismo diseño.
- Por último, dispone de capas, una herramienta muy utilizada en programas de diseño y con todas sus ventajas asociadas: ocultar o mostrar capas, bloquearlas para trabajar en unas zonas del diseño sin afectar a otras, superponer capas, etc.
El inconveniente más importante es su precio: como herramienta gratuita, solo permite hacer un único diseño, con un espacio de almacenamiento limitado a 2 Mb y este diseño es público, es decir, cualquiera puede ver y reutilizar este diseño.
El plan más completo incluye almacenamiento ilimitado, diagramas ilimitados, etc. y otras interesantes características como la integración con Google Drive y la privacidad del trabajo realizado. En este momento este plan tiene un coste de algo menos de 10 dólares al mes, teniendo en cuenta que es el coste para un único usuario.
Sería muy interesante que Gliffy contara con un plan de precios enfocado a entidades educativas, centros de investigación u organizaciones no lucrativas, o bien ofreciera algunas características ampliadas del plan gratuito.
Alternativas a Gliffy
Para estudiantes, docentes o pequeñas organizaciones, cabe plantearse otras herramientas en línea totalmente gratuitas, cada una con sus ventajas e inconvenientes, pero compartiendo algunas de las características de Gliffy. Éstas son algunas de las que más me gustan:
Para introducirnos en el mundo de los mapas conceptuales, resulta muy convincente el siguiente vídeo de Tony Buzan, un escritor y consultor educativo muy conocido por defender esta herramienta de estudio, teniendo el cuenta cierta grandilocuencia que suele caracterizar a muchos expertos anglosajones en la defensa de sus ideas:
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